Síntesis del estudio del Doctor Bango.
En este capítulo llamado “Las llamadas iglesias de peregrinación” el profesor Bango, catedrático de historia del arte en la Universidad Autónoma de Madrid, nos habla de la génesis de este tipo de iglesias, de su historia, de su evolución arquitectónica, de sus funciones, la terminología, de su sentido y de su por qué.
El profesor Bango comienza el capítulo con el problema de la terminología. En esta parte del texto nos habla del estudio y seguimiento de las llamadas iglesias de peregrinación. En un principio se habla de que “las llamadas iglesias de peregrinación” no son una serie de conjunto de edificios de fórmula homogénea como se ha solido creer en la historiografía tradicional. Muchos teóricos del arte han intentado buscar una escuela que reúna a todas estas iglesias de peregrinación, pero a medida que se podía llegar a establecer las líneas generales de una escuela arquitectónica se veían que no poseían todas las mismas características. Como bien dice el profesor Bango “Son diferentes eslabones de una cadena experimental en la búsqueda de un templo apropiado a las circunstancias litúrgicas y estéticas de una época bajo los condicionamientos y limitaciones de los recursos técnicos”. Se veía a estas iglesias como “producto” de las peregrinaciones del culto de las reliquias santas. Pero en esta parte se centra en la desmitificación de esa nomenclatura aceptada por la historiografía clásica. Se ve como durante mucho tiempo se relacionaron distintas iglesias de las rutas de peregrinación (Saturnino de Toulouse, Santa Fe de Conquies y Santiago de Compostela) como elementos de una misma escuela o línea arquitectónica. Será Lambert el primero en poner en duda la hipotética existencia de una escuela común. Se discutirá este tema durante muchos años. Pero precisamente por esa notoria multiplicidad de formas por las que hoy en día difícilmente se tiene la idea de que existiese esa escuela de “las llamadas iglesias de peregrinación”.
Continúa el profesor Bango el capítulo con el tema del desarrollo de las cabeceras, de la girola y del crucero. En este a apartado del texto se nos comienza hablando de la girola. Nos dice que esta la que articula los ábsides y que es una de las cosas más significativas de las llamadas iglesias de peregrinación. El deambulatorio también es descrito y su función, además de los tipos de criptas y ábsides. Tras ello se dan unos ejemplos de templos que posean girola con cripta y deambulatorio, como es el caso de la catedral de San Esteban II en Clermont-Ferrand. Las cabeceras también obtienen un gran interés por el profesor Bango en este capítulo. La función de la girola será la continuación. En este caso comienza con la plena función de la girola, a partir de los estudios de L. Grodecki, Y dice que la girola tiene la función de facilitar el paso de los fieles a los microespacios que contienen los restos de los santos y mártires, y a las capillas radiales. También se habla de la función de las capillas radiales, y aquí se dice que esta es la de guardar las reliquias sagradas. A partir del siglo X se produce, según nuestro catedrática de historia del arte, un fenómeno fundamental en la arquitectura de los templos y es la de que los altares de los templos no se pueden disponer libremente sobre el espacio de las naves, y pone de ejemplo Cluny II. Tras todo esto se comienza con el análisis de las formas de distintos templos de peregrinación como por ejemplo San Ciriaco de Gernrode, San Juan Bautista, Santiago de Compostela, y demás. El tema de los altares también será hablado en esta parte. Se trata la función de los altares, el por qué de tantos y como ejemplo se dice que en el altar mayor de la catedral de Santiago no pueden cantar misa los sacerdotes, sino los obispos, cardenales y papas. Acaba el apartado volviendo de nuevo al problema de la terminología de las “iglesias de peregrinación” basándose en los estudios de J.A. Puente Miguez.
El penúltimo punto se titula “Articulación estética de los paramentos y articulación constructiva de los abovedamientos, intercolumnios y tribuna”. Aquí se comienza hablando de lo que se conoce como un elemento también fundamental para este tipo de templos y es la tribuna. Es un espacio destinado a los fieles, para Lambert se trataba de lugares donde se podían situar enormes masas de peregrinos y fieles los días de gran afluencia, pero también se ha visto que desde ahí los peregrinos tenían grandes dificultades para seguir los oficios. También se dice que era difícil deambular por ellas dado que solían estar llenas de objetos colocados sin orden ninguno. Se verá en el gótico que este espacio se aprovechará para lo estrictamente necesario, prescindiendo del espacio. Después de esto se habla de la función de la tribuna. Las colaterales en los edificios románicos responden a una doble función según nuestro catedrático y son las siguientes: Como estructura que “amarre” la gran altura de la nave central, y conseguir un efecto dinámico decorativo en los muros. En el gótico esta tribuna o matronio será sustituida por un elemento nuevo, el llamado “triforio”. El triforio era una galería de vanos que se situaba encima de las arcadas que daban a las naves laterales. Esta línea de vanos se abría en el grueso de los muros, aligerándolos y proporcionando luz al interior de la iglesia. Los máximos de la técnica de la vidriera y desaparición del muro será la Santa Capilla de París.
La última parte habla de las fachadas torreadas. Se ven las torres de las fachadas como un elemento característico de este tipo de construcción y que se convierte en elemento fundamental. Mediante un fragmento de un texto se ve como se construyeron las torres de la catedral de Santiago y como estas le dieron una gran belleza al edificio. Se dice que estas torres ya venían definidas en el proyecto del templo compostelano en los planos del maestro Mateo. Las grandes fachadas con torres en los extremos y torres en la intersección de los brazos del crucero y la torre del cimborrio, dice Aymeric, que es una fórmula típica de las grandes basílicas del imperio. Después de esto se analiza la fachada torreada occidental de la catedral y dice que se ha convertido en una de las exposiciones más ricas y constantes de la arquitectura templaria occidental. Estas dos torres serán la solución más monumental de la gran fachada de la catedral de Santiago de Compostela.
HÉCTOR LINARES GONZÁLEZ.
No hay comentarios:
Publicar un comentario